Era de noche, una de esas noches en las que no se ve ni hasta la esquina, pero Susana sentía que debía ir de todas formas. Su amiga, Marta, la había llamado llorando desconsoladamente por un hecho que para Susana carecía de relevancia: el chico con el que estaba saliendo la había dejado. Quizás otra amiga iría a consolarla, pero esto no era una característica en esta joven un tanto ácida. "Te lo dije, te lo dije mil veces y no me quisiste escuchar, sabías que era un mujeriego pero siempre lo negaste. Estabas hipnotizada por ese muchacho, cuyo nombre no me gasté en escuchar, ya que se veía a la legua que no iban a durar mucho" le dijo Susana a su amiga en cuanto esta le abrió la puerta. Ese joven misterioso era Juan Cruz, un chico de otro barrio que Marta había conocido en una fiesta un sábado a la noche. Enseguida se había sentido encandilada por su sonrisa, lo que nunca imaginó fue que la charla de esa noche llegaría tan lejos.

Termina en una porno lesbica, o en un topic de buitreo con farodelalconchadelmono ?

Genial. Me encanta continuar historias. ¿Puedo? Bue ya me mande.

Juan Cruz era el tipico muchacho comprador que caia bien a todo el mundo sin molestarse siquiera por proponerselo. No era un galan, pero sabia utilizar el don de la seduccion como nadie. Un gesto, una mirada penetrante, una sonrisa bien colocada y la mujer que el deseaba caia en cuestion de tiempo. Siempre tenia un tema de conversacion y parecia mas bueno de lo que en realidad era. Lo que se dice, un tipo simpatico.

Susana era el otro opuesto. Era timida. Siempre se habia sentido fea, aunque en realidad fuera de una belleza increible. Su inseguridad era su mayor falencia. Su inseguridad y, bueno vamos a ser sinceros: Sus amigas. Susana nunca estuvo rodeada de buenas amigas que buscaran y desearan lo mejor para ella. No. "Las chicas" como las llamaba Susana, eran un puñado de arpias de primer nivel, dispuestas siempre a atacar por donde mas duele, sin discriminar si la victima de aquel ataque era una dentro del grupo. Eso no importaba. El placer de ridiculizar y de herir era lo que las alimentaba.
Susana se creia debil y mostraba debilidad y siempre habia sido el blanco perfecto para estas. Su familia se lo decia pero ella siempre negaba y se enojaba ante tales acusaciones. "Son buenas chicas" se defendia "Ustedes no las conocen". Pero la realidad es mas dura cuando uno no quiere afrontarla. Ella sabia que clase de personas eran pero tenia la esperanza de que cambiasen y por otra parte les costaba tanto hacer amigas...

Juan Cruz se acerco a ella en aquella fiesta. El no habia tomado una gota de alcohol. Sabia que a las chicas no les atraian los chicos que daban espectaculos penosos a causa de unas copas de mas. El estaba al tanto de todo no se le escapaba ni un detalle. "Hola, vos sos Steffi, amiga de la cumpleañera, no?" mintio Juna Cruz, utilizando una tactica que le habia valido infinidad de veces para iniciar una conversacion espontanea con una chica con la que el deseaba hablar.

"No, soy Susana" dijo ella. "Soy la prima", solto Susana, mientras lo miraba fijamente a los ojos. No podia creer como aquel muchacho se habia dignado a hablarle. Como alguien habia diganado a hablarle. Y era tan lindo.. "¿Tendra novia? Que linda sonrisa que tiene..."

"Uhh disculpame, te confundi con otra chica muy parcida. Asi que sos la prima de Sol, si ¿me parece que te tengo de vista de algun lado puede ser?" solto con una sonrisita Juan Cruz mientras tomaba el primer sorbo de alcohol de la noche. Los colores de su sex on the beach se mezclaban mientras el vaso iba a su boca. Para el, significaba el momento de relajacion, ya tenia a su presa donde queria. Para ella, el era todo esa noche. No podia pedir mas.

.....

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(21-11-2011 23:24)Julita escribió:  "se veía a la legua que no iban a durar mucho" le dijo Susana a su amiga en cuanto esta le abrió la puerta. Ese joven misterioso era Juan Cruz, un chico de otro barrio que Marta había conocido en una fiesta un sábado a la noche.

Ya se me mezclaron los personajes, faro, prestá atención con los nombres.

Igual, para mi que Juan Cruz se la lleva a vivir a las tolderias.

Mañana lo leo tranqui en horario laboral, que para eso me pagan (?) jaja

En realidad si lei, hasta que me tope con la biblia de faroelnickmaslargodelmundoylpm

"Mmm puede ser", mintió Susana para que aquel muchacho no se fuera de su lado.
Pasó la noche entre tragos y charlas, hasta que el sol comenzó a asomarse en el horizonte.
"Es hora de que me vaya, como ya te conté no vivo cerca" le dijo Juan Cruz, pero no estaba en sus planes no volverla a ver "Te dejo mi celular, por si algún día querés salir a tomar algo".
En ese momento Susana estaba cegada ya por ese joven comprador. Anotó su celular, lo saludó con un beso en la mejilla y fue en busca de su prima para volver a casa.
Pasaron semanas, Susana y Juan Cruz no dejaban de mandarse mensajes, hasta que llegó un sábado y el mensaje tan ansiado por ella: "Querés salir a tomar algo esta noche?".
Susana no lo podía creer, tenía que ver qué se pondría y qué excusa daría a sus amigas al no salir con ellas esa noche sin tener que contarles que saldría con un chico, ya que era muy reservada en ese aspecto.
Susana: Encantada, dónde nos vemos?
Juan Cruz: En Million te parece bien? A la 1?
Susana: Perfecto, nos vemos en la entrada

(22-11-2011 00:01)Lechuck escribió:  

(21-11-2011 23:24)Julita escribió:  "se veía a la legua que no iban a durar mucho" le dijo Susana a su amiga en cuanto esta le abrió la puerta. Ese joven misterioso era Juan Cruz, un chico de otro barrio que Marta había conocido en una fiesta un sábado a la noche.

Ya se me mezclaron los personajes, faro, prestá atención con los nombres.

Igual, para mi que Juan Cruz se la lleva a vivir a las tolderias.

No hay mezcla para nada. Solo que intente darle un giro de tuerca en donde en aquella fiesta Juan Cruz conocia a Susana primero y despues a Marta. Y era por eso que Susana, en el primer post de Julita, le advertia de como era Juan Cruz porque aquella noche se dio cuenta (cosa que no llegue a relatar).
De todas formas ahora Julita siguio con la historia y ya le cambio el sentido asi que tendre que adecuarme. ¿Y los demas? Todos pueden continuar la historia, estaria bueno que se prendan.

Sigo


Pese a tener nombre de telo barato, con sabanas manchadas de fluidos corporales secos, Million, era en realidad, un bar a todo lujo. Una excelente opcion para una primera cita y para encandilar a una damicela timida e impresionable como Susana. Juan Cruz, no daba puntada sin hilo.
Pero lo que Susana no sabia era que aquella semana, este habia conocido a otra chica en otra fiesta. Y la susodicha no era nada mas ni nada menos que Marta, una de las arpias de su grupo de amigas. Una rubia exuberante cuyo cuerpo tenia mas huellas dactilares que el pasamanos del 160.

Susana se habia puesto linda. Era su primera cita con un chico y se habia pintado con la ayuda de su mama, la cual no paraba de darle consejos. Su vestido era de un azul fino, y se abrochaba por detras. Era un vestido sencillo que le quedaba muy bien, sobretodo era ideal para estos dias de calor.
Se puso un poco de rubor y se pinto los ojos de un azul tenue acorde a su vestido. Sus ojos nunca se notaron tan vivaces como aquel dia. Era una princesa y estaba esperando deseosamente que se hiciera las 12:30 para salir al encuentro de Juan Cruz.
"¿Se enojara de que yo no se jugar al pool?" "¿Sabra el? Ay, que estupideces digo, seguro que sabe, y debe jugar re bien" "¿Me querra dar un beso?" "¿Y si lo intenta que hago?"¿Se dara cuenta que nunca bese?".

En otra escena totalmente distinta de capital federal, se encontraba Juan Cruz sentado frente a la computadora tecleando con gran entusiamo. Estaba chateando con Marta para una salida. Le decia cosas lindas, cosas zarpadas. Sabia el tipo de chica que era Marta, ya le habia sacado la ficha. No tenia que andar despacio con ella. Era del tipo de chica que no tardaria en tener sexo con el. En su interior despreciaba a ese tipo de mujeres, pero el era un conquistador y las mujeres solamente significaban otra marca en su cuentaganados.

Hacia media hora que lo estaba esperando paradita en la esquina. En donde el dijo que se encontrarian. Ya no habia rastro de aquel hermoso peinado que se habia hecho, y su sonrisa comenzaba a desdibujarse. Era triste aquella imagen, de esa muchacha tan linda y tan desolada, esperando por alguien durante mas de media hora. "¿Se habra olvidado?". Un mensaje de texto le llego a su celular "Estoy en camino, lo que pasa es que el transporte publico es un infierno, el trafico esta terrible, llego en 20 minutos". Otros 20 minutos de espera, pero sabria que lo veria y que valdria la pena y eso era mas que suficiente. Al fin de cuentas, siempre habia sido una chica paciente, y se regocijaba pensando que su paciencia seria recompensada con una linda noche al lado de aquel chico.

Chateando se olvido de bañarse y cambiarse y ya era la 1 de la madrugada cuando se dio cuenta. Juan Cruz se apresuro a cambiarse, le mando un mensaje a Susana poniendo como excusa lo lento que estaba el trafico y recien 1:45 salio aquella noche de su casa, no sin antes meter una cajita de Tulipan en su billetera. Tenia intenciones de que Susana se acueste con el. Seguramente lo lograria, como siempre que se proponia algo...

que mierda es esot?

(21-11-2011 23:39)gonnza escribió:  Termina en una porno lesbica, o en un topic de buitreo con farodelalconchadelmono ?

Pero no estaba en los planes de Susana que sucediera más que un beso esa noche.
"Al fin, no sabés lo que era el tráfico, increíble a esta hora la cantidad de gente que andaba" le dijo Juan Cruz al llegar a su encuentro.
Susana se había olvidado de que había estado esperando ahí por más de una hora, no prestó atención siquiera a lo que llevaba puesto ni pensó que a las 2 de la mañana no andaba nadie por ahí, sólo se volvió a encandilar con su sonrisa, esa sonrisa tantas veces compradora que ahora parecía brillar aun más.
"No te preocupes, yo no llegué hace mucho" mintió Susana sin tener idea de por qué lo había hecho, quizás para hacer sentir mejor a ese joven que probablemente hubiese tenido algún problema en su casa y por eso se había retrasado.
Entraron a Milion, un lugar soñado para Susana, no podía creer que hubiera un bar así en su barrio y que nunca lo hubiese conocido antes. Salieron al patio, el aroma a azahares la cautivó. Juan Cruz pidió su clásico Sex on the Beach y Susana se animó a probar un trago hasta entonces desconocido por ella, Naranjo en flor.
Pasaron un rato sentados en la escalera charlando de temas irrelevantes para ambos, hasta que Juan Cruz le sugirió a Susana ir a jugar al pool, ese juego tan temido por ella por no saber jugarlo y temer pasar vergüenza.
A fin de cuentas no le pareció difícil, lo entendió rápido y se divirtió mucho, estaba contenta con lo perfecta que había transcurrido la noche para ella.
Comenzó a amanecer, Juan Cruz no podía creer que se hubiese pasado toda la noche tan rápido, pensó que algo en él estaba fallando. "Cómo puede ser que ya me tenga que ir? Y no sólo no me acosté con ella sino que tampoco la besé... algo anda mal acá"
Salieron del bar, Juan Cruz seguía anonadado por cómo se había dado la noche, en otra situación ahora estaría amaneciendo en la cama de algún hotel, pero esta vez había sido diferente.
"En qué te vas?", le preguntó a Susana.
"A pie, vivo muy cerca" le respondió ella.
"Te acompaño"
Al llegar a la puerta de su edificio, Susana estaba nerviosa por la despedida, sabía que en ese momento la besaría, o al menos eso esperaba.
Y así fue. Un beso dulce y cálido que terminaría de hechizarla.
"Seguimos en contacto, pequeña", le dijo Juan Cruz, y se marchó.

Al entrar en su casa Susana lo primero que hizo fue llamar a su amiga, Marta.
"Su? qué hacés llamandome a esta hora?"
"Marti! tengo algo importante que contarte" le respondió Susana inmediatamente y muy entusiasmada.
Pero como siempre había sucedido Marta tenía algo para contar también y no dejó que su amiga le contara primero.
"Yo también tengo algo para contarte amiga, en la semana conocí a un chico, guapísimo, se llama Juan Cruz. Anoche estuvimos chateando hasta la 1 y pico de la mañana, y no seguimos porque me dijo que se iba a dormir.
Esta noche salgo con él! Me invitó a un bar.... Milion creo que se llamaba"
Susana no lo podía creer, cuántas posibilidades había de que Marta estuviera por salir con el mismo chico con quien ella había salido esa noche? Se quedó helada en el teléfono, triste, sin saber qué responder.
"Su?, estás ahí?, qué tenías para contarme?"
"Sisi, estoy acá... no es nada comparado con lo que me contaste. Me alegro mucho amiga, mañana hablamos" y le cortó porque no pudo contener las lágrimas.
Estaba demasiado cegada por ese chico, y ese beso, su primer beso, había significado mucho para ella.
Ese día Susana decidió que no le contaría nada a Marta acerca de Juan Cruz, ni a Juan Cruz que sabía de Marta.
Estaba tan despechada por la situación que decidió que seguiría adelante, pero que ese muchacho las iba a pagar.

Cambiaste todo y haces ver a Juan como una mala persona. No es el sentido que queria darle a la historia. ¿Desde cuando Susana tiene valor para vengarse? Mmm yo queria que la historia termine mal, con un corazon roto y un embarazo perdido. Pero evidentemente los finales tristes no gustan mucho.

En fin...

Lo que Susana no sabia era que aquella noche, Juan llego a su casa y se quedo pensando en ella como nunca habia pensado en una mujer. ¿Se estaba enamorando? Tal vez esa tonta salida con esa chiquilla lo habia hecho cambiar. No hubo sexo y apenas hubo un beso, un beso dulce. ¿Que le estaba pasando? ¿Se estaba ablandando? Esa noche le costo dormirse, la cara y la risa de Susana transitaron por su cabeza hasta el alba.

Susana estaba en shock. Se dio cuenta que estaba embarazada. "¿Como puedo estar embarazada si yo nunca...?" Pero rapidamente se dio cuenta que no era un embarazo no deseado sino hambre lo que golpeaba su panza. Se levanto y abrio la puerta del refrigerador. Agarro lo primero que vio, un alfajor Capitan del Espacio (Nota: La gente de Capital Federal pase por alto el nombre del alfajor). Le parecio una delicia. "Enamorarse da hambre" penso, y rio. Rio tontamente sola.
Pero no podia apartar lo que habia escuchado por boca de su amiga. La cual tambien salia con un chico llamado Juan Cruz. "No puede ser el mismo chico, tiene que ser otro" se mintio para si misma Susana, quien estaba acostumbrada y se le daba bien eso de no querer ver una verdad inminente. Volvio a su cama, abrazo la almohada pensando en Juan Cruz y en su boca tentadora. Aquella boca que le habia dado su primer beso en el portico de su casa. "Parece una pelicula".

El celular empezo a vibrar. Juan se desperto. Era Marta. "Acordate que hoy a la noche nos vemos, preparate porque soy muy mimosa". Juan vio el mensaje y volvio a hundir su cabeza en la almohada. ¿Que hacer? La infidelidad nunca fue cosa seria para Juan, el estaba acostumbrado a ser infiel y nunca tuvo el menor cargo de conciencia. Pero ahora era diferente, le estaba dando culpa haber recibido ese mensaje. Estaba dudando de ir a ver a Marta, dudaba de tener sexo con ella. El sabia que Marta era el tipo de chica que tenia sexo en la primer salida. La desprecio. Odio todo en cuanto a Marta. Su cuerpo escultural, que este tan regalada, no poder hablar de nada interesante. No podia evitar compararla con la calida y naif Susana. Con su mirada atenta, con su risa aniñada pero contagiosa. Con sus ojos sinceros.

No obstante, los impulsos primarios ganaron. Y Juan Cruz le mando un mensaje a Marta. "Nos vemos, hermosa, yo tambien soy muuuuuy mimoso". No podia desperdiciar sexo gratis. Pocos hombres pueden, y el no era la esepcion. Aquella noche la veria. La llevaria a Million y fingiria pasarla bien, solamente su tarea estaria cumplida cuando la puerta de la suite de lujo se cerrara tras el y Marta estuviera adentro tumbada en la cama quitandose la ropa. Como un adicto al juego que promete no jugar mas pero que despues se tienta y termina jugando y apostando, asi estaba Juan. Los sentimientos por Susana no paraban de crecer, pero el no podia negar su forma de ser, no podia frenar lo que el era. Y el era ante todo un ser egoista que primero llenaba sus necesidades y despues reparaba, si era necesario, en las de los demas. Siempre habia sido asi y no iba a cambiarlo ahora.

Susana paso toda la tarde sintiendo muchas cosas a la vez. Por un lado sentia traicion y por el otro enamoramiento. Un coctel explosivo de sentimientos, sin dudas. Pero sabia que no podia vivir con la duda. ¿Que muejer puede? Y decidio ir esa misma noche, de incognita, a espiar a su amiga Marta, y ver si aquel Juan Cruz, era su Juan Cruz, el chico que en menos de 24 horas le habia no solo robado un beso sino tambien su corazon....

A eso de las 00 hs Susana se conectó para ver si Marta estaba online, y efectivamente ahí estaba, probablemente arreglando con Juan Cruz la hora para encontrarse.
"Marti! así que hoy salís con el muchacho ese que me contaste?", le dijo Susana evitando nombrarlo, ya que todavía tenía la esperanza de haber escuchado mal y que en realidad se llamara Juan Luis, Juan Jose, Juan cualquiercosa menos Cruz.
"Su!!! sí, estoy hablando con Juan Cruz, en una hora nos vemos en el bar que te conté anoche"
Susana no quería saber más detalles, ni siquiera cómo era que lo había conocido, "en la semana" ya era suficiente para ella, así que se desconectó. Dudaba si ir o no... ¿quería realmente verlo a él coqueteando con su amiga tal cual lo había hecho con ella la noche anterior? ....

A la 1 am Susana estaba en Milion, prácticamente disfrazada con lo que se había puesto, pero lo único que le interesaba era estar irreconocible. Pasó una hora... dos... se hicieron las 3 de la mañana y Marta y Juan Cruz no aparecían.
"Qué raro, habrán ido directo a un hotel", pensó mientras retomaba el, esta vez interminable, camino hacia su casa.

Pero muy lejos de eso estaba la realidad:
Juan Cruz llegó a la 1:30 a Milion, deseando que por alguna razón Marta nunca llegase. Lo único que lo movilizaba a ver a esa muchacha era la idea de pasar una noche lujuriosa en una cama de hotel. No había podido dejar de pensar en Susana, aquella niña que tan sólo en una noche había logrado lo que tantas otras no habían podido en más de un mes, importarle. Pensaba en lo culpable que se iba a sentir la próxima vez que hablara con ella, más aún la próxima vez que la viera, porque sus ojos irradiaban tanta dulzura e inocencia que no podría no contarle la verdad.
Afortunadamente para él, le llegó un mensaje de Marta: "Perdoname, tuve un inconveniente con mi mamá y no voy a poder ir esta noche. Espero que nos veamos en otra oportunidad bombón, no perderé las ganas de mimarte". Juan Cruz sintió algo de rechazo por ese mensaje tan vacío de sentimientos, y lo único en lo que ocupó la mente desde ese momento fue en intentar recordar la dirección de la casa de Marta. Empezó a caminar por el barrio hasta que la encontró. No sabía que hacer, por qué había ido hasta su casa? no podía tocar timbre a esa hora y no quería despertarla con un mensaje. Estuvo dudando qué hacer hasta las 3 de la mañana, sentado en las escaleras de la entrada, hasta que decidió volver a su casa.

Si hubiese esperado un poco más se hubiese encontrado con Susana, quién minutos más tarde llegaría, triste, porque ya se estaba convenciendo de lo peor. No podía borrar de su cabeza la imagen de Juan Cruz besandola, sólo que no sería ella a quién besaba sino a Marta, y no sería un beso cálido y dulce sino más bien apasionado.
Entró a su casa y decidió olvidarse de ese chico, definitivamente. Lo borró del msn, y bloqueó su número de celular, no quería saber más nada, por eso es también que se distanció de Marta, para no tener ni noticias de él.

Pero Juan Cruz nunca dejó de pensar en ella....

Rayos, escriben bien los dos . Esta entretenida la historia. Escribiria algo, pero seguramente la cague JAJA

No la vas a cagar. Dale, prendete y escribi tu continuacion. Esta bueno que se copen.

Saludos