Multitudinarias marchas contra la nueva ley de educación
Más de un millón de estudiantes y docentes se movilizaron de manera pacífica en las principales ciudades del país para repudiar la legislación aprobada ayer por el Congreso. Afirman que se recortarán los fondos y que una gran cantidad de maestros perderá su empleo. Por: Julio Algañaraz, corresponsal en Roma
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En la más grande movilización que se recuerda en muchos años en Italia, más de un millón de jóvenes, trabajadores docentes y familias marcharon hoy en las principales ciudades convocadas por las centrales obreras y los sindicatos de la instrucción publica, que proclamaron hoy una huelga general de la enseñanza contra la nueva ley aprobada ayer por el Parlamento propuesta por el gobierno conservador de Silvio Berlusconi. Los sindicatos afirman que la nueva ley producirá recortes en los fondos para las universidades y las escuelas por 8000 millones de euros en tres años.
En Roma varias columnas se concentraron en la céntrica Piazza del Popolo en un espectáculo cívico de gran colorido, como es costumbre en las manifestaciones italianas. "Somos un millón", afirmaron los líderes sindicales, eufóricos por la respuesta popular.
La movilización en la capital, con decenas de trenes y miles de coches y ómnibus llegados desde toda Italia paralizó el tránsito en buena parte de la ciudad. Muchos estudiantes que volvieron a protagonizar el corazón de la protesta, no pudieron llegar a la plaza del Popolo debido al bloqueo del tránsito ciudadano.
En Milán también asumió proporciones multitudinarias la protesta, que llenó la Piazza del Duomo, centro vital de la capital del norte italiano. La Red de las Escuelas presidió el cortejo principal, con miles de chicos y sus padres que caminaron detrás de un enorme cartel que decía: "Protejamos la escuela pública, que arriesga la extinción".
Las protestas siguieron por toda Italia. En Génova se encontraron miles de estudiantes de las escuelas y las universidades con los docentes y padres de los chicos de las escuelas primarias. Del acto en las plazas Mayor y Neptuno participaron unas 30 mil personas.
En Génova y Turín hubo manifestaciones parecidas, como en Bolonia, Brescia, Palermo, Nápoles Messina, Reggio Calabria, Cagliari. En el noreste de Italia, donde se esperaban adhesiones menores, hubo en cambio manifestaciones multitudinarias, como en Padua, Venecia, Bolzano y Trento.
En Roma, el líder opositor de la centroizquierda, Walter Veltroni, secretario del Partido Democrática, caminó al frente de la columna principal acompañado por el líder de la CGIL, la principal de las centrales obreras, Guglielmo Epifani. "Que el gobierno escuche a la sociedad", afirmó Veltroni.
Los manifestantes -que protestaron en forma pacífica y sin incidentes- reclaman que la ley sea cancelada y se organice una mesa de negociaciones de todos los sectores interesados en la instrucción pública. Veltroni y otros dirigentes opositores anunciaron que de inmediato se organizaran miles de mesas para cosechar medio millón de firmas de ciudadanos necesarias para someter la nueva ley a un referéndum de abolición.
Las reformas de la nueva ley contemplan recortes de presupuesto a las escuelas y las universidades. Una de ellas reimplanta el maestro único en lugar de la reforma modernizadora de tres docentes cada dos clases. Los sindicatos sostienen que esto costará el empleo a 87 mil maestros y que los cambios aumentarán la pérdida de empleos de los docentes precarios, que carecen de un contrato a tiempo indeterminado.
En los carteles, la ministra de Educación aparecía dibujada como "Beata Ignorancia" y un grupo de estudiantes, como en Milán, se habían disfrazado de clowns contra "un gobierno de payasos", como lucían sus carteles.
En el barrio de la Magliana, en la periferia de Roma cerca de las autopistas, se organizó un mitin de emergencia de varios miles de estudiantes porque la columna de la que participaban no logró acercarse al centro de Roma debido al bloqueo del tránsito.
Grupos de chicos desfilaron llevando carteles, uno de los cuales uno decía: "Mamá y papá no se queden mirando que hay que salvar la escuela". Esloganes, globos multicolores, rondas de estudiantes que bailaban y grupos que organizaban "funerales de la instrucción pública" vestidos rigurosamente de negro animaron la concentración de Roma.
Fuente: Clarin
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