Hay quienes alientan la estatización de los servicios públicos privatizados, a tono con la creación de varias empresas estatales durante estos muchos años de gobierno kirchnerista y a la no menos importante estatización virtual de las empresas privadas que dependen de la espada de Damocles del subsidio.

El “relato” subliminalmente pretende que “lo público” y las empresas públicas, son de todos, a diferencia de lo privado, que es de unos muy pocos. Y remarca la ficción de que “el Estado” es una entelequia benigna y protectora, cuando en realidad el Estado es solo el gobierno de turno, con sus mas y sus menos.

No teoricemos y recordemos la verdad de las “empresas públicas” en la Argentina, que sufrimos todos entre 1930 y 1990. Ni los conservadores, ni los radicales, ni los peronistas, ni los militares lograron convertir una empresa estatal en una empresa seria. Ninguno, en 60 años.

Valen algunos flashes: desde su expropiación a mediados de los ’40 Entel fue un progresivo desastre hasta el colmo de que instalar un teléfono tardaba 20 o 30 años, salvo los truchos, que por ¡u$s 5000! se conseguían en pocos meses. Los trenes, también estatizados en esa época, fueron perdiendo puntualidad, limpieza, comodidad, modernidad y ahora también han perdido la mas elemental seguridad de tener frenos.

La electricidad no se quedó atrás y todos los mayores de 50 años nos acordamos de los permanentes cortes de Segba. Que solo se parangonaban con la endémica falta de gas en invierno, carencia que nos garantizaba Gas del Estado. Obras Sanitarias no modernizó su red de aguas y cloacas en décadas. Y los subtes, que fueron de los primeros del mundo... siguen con los mismos vagones, que debieran estar en un museo. La lista de ejemplos es tan larga como la nómina de empresas públicas con la que los sucesivos gobiernos de todos los sectores políticos, castigaron al ciudadano consumidor.

Con semejante experiencia acumulada cualquier discusión ideológica o teórica sería burlarse de la gente. Cuando el gobierno es el dueño de la empresa, no la dirige bien porque tiene mil condicionamientos políticos, gremiales y de incapacidad de gerenciamiento, amén de tentaciones multimillonarias para corromperse. Y ni siquiera la controla, porque los órganos controladores quedan sometidos en los hechos a las empresas controladas. Pasó siempre y va a seguir pasando.

http://www.urgente24.com/197896-estatizar-y-destruir

Una grafico vale mas que mil palabras.
Yo no se si esta fue la mejor decision que se pudo tomar, asi como tampoco se la forma que en la realidad van a tener el proyecto que el gobierno tenga para YPF de aca a un tiempo... Pero asi como veniamos no se podia seguir, el petroleo es la materia prima fundamental de cualquier industria moderna. Importarlo a precios exorbitantes no parece tener demasiado sentido en un pais que con las inversiones adecuadas no deberia tener problemas para autoabastecerse.

Pero desde el 90 para acá las empresas privatizadas funcionaron igual o peor que cuando eran públicas.
Vos decis que la culpa es del sistema de subsidios y el "control" del Estado?

Petrobras parece que funciona muy bien en Brasil y es mitad del Estado y mitad privada...

@JulianD. Estamos hablando de la eficiencia de Repsol-YPF satisfaciendo al consumidor, no de las reservas que pueda tener... En todo caso, tu gráfico muestra que dichas reservas crecieron en el menemismo, y decrecieron en el kirchnerismo.

@juanman lo que decís no se sostiene por ningún lado. Desde cuando se privatizaron las empresas estatales desaparecieron los cortes de luz programados (por falta de energía), la escasez de gas, vos pedías que te instalen un teléfono en tu casa y al día siguiente ya lo tenías (Entel, estatal, te podía hacer esperar 30 años ). Además de que el contribuyente dejó de pagar el déficit que esas empresas producían. Desde que empezó el intervencionismo kirchnerista con su control de precios, las empresas empezaron a desinvertir, porque ya no tienen incentivos para hacerlo.

Cuando se dice en el artículo que todas las empresas públicas argentinas funcionaron mal, se dice en base a la historia argentina. No siempre el desempeño de una empresa publica es peor que el de una empresa privada. Tenés un monton de empresas estatales chinas que funcionan bien. Pemex y Petrobras también. Pero la empresa estatal presenta dos fallos fundamentales:
-el primero es que puede funcionar mal a perpetuidad (pq se financia con impuestos) en cambio una empresa privada si funciona mal quiebra.
-Por otro lado, el problema de la empresa estatal comienza desde el momento de su formacion: una empresa privada se forma mediante una asociación voluntaria de inversores y emprededores, que aportan SU dinero, para ganar más satisfaciendo al consumidor; en cambio una empresa estatal se forma cobrando impuestos a la ciudadania. O sea, desde el momento en que una empresa estatal es fundada, los ciudadanos salen perdiendo, porque se ven obligados a financiar coactivamente algo que no estaba en sus planes mas allá de si la empresa al final funciona mas o menos bien (Petrobras), o si es un completo desastre (Aerolineas).
Además, la empresa estatal no tiende a brindar un mejor servicio porque no tiene ningún incentivo para hacerlo. La empresa de una empresa privada depende de su capacidad de satisfacer al consumidor, vendiendo el producto que desea al precio más barato posible. Si no lo hace, quiebra. En cambio, una empresa privada se financia con impuestos, así que aunque satisfaga o no al consumidor, no quebrará. Entonces, los gerentes se pueden dar el lujo de brindar un servicio pésimo, total que los impuestos que cobra el gobierno financian cualquier déficit que la empresa estatal pueda cosechar.

La inversiones las tiene que hacer la empresa, no el estado.
En todo caso se le puede achacar al gobierno el porque no reaccionaron antes, completamente de acuerdo..
Si mal no recuerdo hace un poco mas de un mes se insto a la junta directiva a que reinviertan las utilidades del periodo anterior.
Hicieron oidos sordos y volvieron a girar todas las utilidades al exterior ( http://www.pagina12.com.ar/diario/econom...03-23.html )
Y es sabido que estaban en tratativas para vender sus acciones a un grupo chino...

Por otro lado, hacer una inducción histórica atravesando distintos momentos económicos, sociales y políticos me parece una boludez.
Si es por eso, deberíamos resignarnos en todo sentido a ser para siempre lo que fuimos.

Searchiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiin'

Statization and destroooooooooooooooooooooooy

Está bueno que haya estado fuerte en los paises bananeros, entre más totalitario, y menor mobilidad para la población, mejor. Menos competencia. Con que la mayoría sepa operar máquinas y sepa manejar a los que operan las máquinas nos alcanza.

Y bueno, obviamente siempre manteniendo una buena elite de gente bien, preferentemente descendientes de grandes propietarios y terratenientes de épocas de la colonia, así coordinan las cosas y nos proveen de recursos a precios competitivos en el mercado mundial.

(18-04-2012 19:11)Ezql escribió:  El “relato” subliminalmente pretende que “lo público” y las empresas públicas, son de todos, a diferencia de lo privado, que es de unos muy pocos. Y remarca la ficción de que “el Estado” es una entelequia benigna y protectora, cuando en realidad el Estado es solo el gobierno de turno, con sus mas y sus menos.

No teoricemos y recordemos la verdad de las “empresas públicas” en la Argentina, que sufrimos todos entre 1930 y 1990. Ni los conservadores, ni los radicales, ni los peronistas, ni los militares lograron convertir una empresa estatal en una empresa seria. Ninguno, en 60 años.

Discrepo totalmente.

Estado es MUY DISTINTO que gobierno de turno, eso es lo que confunde el Kirchnerismo, ellos piensan que son el estado, cuando en realidad son el gobierno.

Yo estoy de acuerdo en la estatización de ciertos servicios públicos, ya que ello representa una POLITICA DE ESTADO, repito de ESTADO, NO de gobierno.
Un politica de Estado es aquella que va a perdurar mas alla de la administración de turno, que va a beneficiar a la sociedad mas alla de los intereses del gobierno actual o futuro.

Lo que si podemos discutir es si las politicas de estado, en el marco actual, son realmente duraderas o beneficiosas, siendo que no hay controles adecuados, y los organismos de fiscalizacion estan paralizados.

Y no teoricemos y recordemos la verdad de las empresas públicas en la Argentina: SOMISA. Orgullo metarlugico de la region, predecesora de la actual SIDERAR en manos del Grupo Techint.
Con la mayor produccion de la region en su momento, reportaba grandes ganancias al estado y su administracion fue eficiente, desligada de los intereses de turno.

Soy de San Nicolas, ciudad en la que funciono la empresa, y conozco bien los detalles de su historia.
Te puedo afirmar que su nivel de eficiencia en la adminsitracion supera con creces el nivel de la actual SIDERAR.
Con el presupuesto que manejaba SOMISA, esta daba empleo a X cantidad de familias y daba ganancias al estado, al poco tiempo de privatizarse, SIDERAR despidio a la mitad de sus empleados, manteniendo el mismo presupuesto, porque su mala administracion la llevo a dar perdidas.

es de gobierno de turno y no de estado, si ponen a camporistas a cargo.

(09-05-2012 14:22)hern escribió:  es de gobierno de turno y no de estado, si ponen a camporistas a cargo.

Por fortuna, pusieron a Galuccio, un hombre que trabajo con Estenssoro en la YPF Estatal que fue lider en Argentina y se estaba expandiendo a Bolivia, Brasil y Texas

Dios Mío, el mismo que dice que Hitler era socialista, nos da lecciones de economía? too much...

(10-05-2012 21:01)linuxin escribió:  Dios Mío, el mismo que dice que Hitler era socialista, nos da lecciones de economía? too much...

La lucha más fuerte no debía hacerse contra los pueblos enemigos, sino contra el capital internacional. La lucha contra el capital financiero internacional era el punto programático más importante en la lucha de la Nación alemana para su independencia económica y su libertad [...]

En la medida en que la economía se adueñó del Estado, el dinero se convirtió en el Dios que todos tenían que adorar de rodillas [...] La Bolsa empezó a triunfar y se dispuso lenta pero seguramente a someter a su control la vida de la nación [...] El capital debe permanecer al servicio del Estado y no tratar de convertirse en el amo de la nación.

Tampoco después de la guerra podremos renunciar a la dirección estatal de la economía, pues de otro modo todo grupo privado pensaría exclusivamente en la satisfacción de sus propias aspiraciones. Puesto que incluso en la gran masa del pueblo todo individuo obedece a objetivos egoístas, una actividad ordenada y sistemática de la economía nacional no es posible sin la dirección del Estado.

Yo no soy sólo el vencedor del marxismo sino también su realizador. O sea, de aquella parte de él que es esencial y está justificada, despojada del dogma hebraico-talmúdico. El nacionalsocialismo es lo que el marxismo habría podido ser si hubiera conseguido romper sus lazos absurdos y superficiales con un orden democrático.



Nosotros somos socialistas [...] somos enemigos, enemigos mortales del actual sistema económico capitalista con su explotación de quien es económicamente débil, con su injusticia en la redistribución, con su desigualdad en los sueldos [...] Nosotros estamos decididos a destruir este sistema a toda costa [...] El Estado burgués ha llegado a su fin. Debemos formar una nueva Alemania [...] El futuro es la dictadura de la idea socialista del Estado [...] Ser socialista significa someter el Yo al Tú; socialismo significa sacrificar la personalidad individual al Todo.



Nosotros somos completamente de izquierda y nuestras exigencias son más radicales que las de los bolcheviques.



Nosotros, jóvenes alemanes de la guerra, nosotros revolucionarios nacionalsocialistas, desencadenamos la lucha contra el capitalismo.

esto es ya como una ley de godwin pero de magnitudes demenciales, no?