Mensaje: #1
Para el que le guste la pesca...
Hay gente en el foro que le guste la pesca ? A mi me gusta. Les paso un texto que encontre por ahi que me hizo reir mucho. Son los tipos de pescadores que uno se puede encontrar en cualquier lado...
PESCADOR SHOPPING: compra cuanto señuelo, caña, reel, línea o producto relacionado con la pesca vea por allí, lo use después o nó. Tiene desde nailon de 0,05 para pescar mosquitos hasta un arpón para ballenas con radio AM/FM, desde carnada seca para celacanto hasta alarma infrarroja para detectar piques, desde serrucho para cortar hielo y pescar en el Polo Norte hasta una caja con 7200 señuelos de goma, desde linterna con reel hasta llamador electrónico para mojarras. No pierde oportunidad de mostrar su última compra y hacernos una demostración con lujo de detalles de como se usar la "porquería" que le trajeron de un raro país del lejano Oriente e intentar convencernos de que compremos uno igual, no sabemos si quiere que lo compremos porque es útil o para no sentirse el único salame que lo compró.
PESCADOR LOBO DE MAR: es el que sabe de todo. Sabe donde tirar, para que lado, a que distancia y ya anticipa que vá a sacar (y acierta). Calcula la distancia de un tiro a ojo y no se equivoca. Conoce los anzuelos al tacto (marca y modelo, país de origen, fabrica y nombre del operario que acciona la máquina) arma los nudos con los ojos cerrados, es capaz de recitar las tablas de mareas de memoria. Conoce cuanto recoveco, pozón, rada, o lugar para pescar exista. Sabe como viene el viento, conoce de carnadas, usa formulas secretas para preparados infalibles, pone un dedo en el agua y le saca la velocidad del agua , la corriente, la temperatura, la acidez y las especies que hay en la zona. Es un genio, tiene un olfato imbatible y siempre pesca. De esta especie se separan dos tipos el LOBO DE MAR BUENO, que no pierde oportunidad de explicar, enseñar y transmitir lo que sabe, y el otro que es el LOBO DE MAR MALO, que ni a palos abre la boca.
PESCADOR LOBO DE MAR TRUCHO: copia al anterior, pero no tiene ni idea de lo que dice, miente como los mejores, guitarrea como los grandes y si pesca es de pura casualidad. Pero dice que fue gracias a su método científico infalible.
PESCADOR LABORATORIO: tiene el equipo de pesca como una sala de cuidados intensivos. Los anzuelos brillan, las cucharitas parecen de plata, las plomadas separadas dentro de una cajita para que no se golpeen. Todo acomodado por orden alfabético o por zona (mar, río, laguna). La caja de pesca forrada por dentro para que las cosas no se rayen. Tiene un "pinito" dentro de la caja para que por las dudas no dé mal olor. Tiene un trapo para limpiar el cuchillo de carnada, otro para las manos, otro para agarrar los peces y otro por las dudas. Lleva una bolsita para tirar la basura, otra para poner los trapos sucios, otro para poner el equipo que usó. Después lava, limpia, pule y reemplaza todo lo que con la lupa que tiene le parece que no está en condiciones de ser usado de nuevo. No le presta nada a nadie porque tiene terror a que se le abolle una plomada cuando golpea contra el agua.
PESCADOR VAGABUNDO: es lo contrario al anterior, no lleva caja de pesca usa una bolsa vieja donde adentro mete todo, líneas, madres, anzuelos, reeles. Conozco uno en particular que usa el cuerpo de una carpa como caja de pesca, mete todo mezclado en el medio le junta las cuatro puntas a la lona, las ata y tira la lona con todo adentro en el baúl del auto hasta la próxima salida. Cuando tira de una punta de nailon sale todo el resto enredado. Si tiene que sacar algo rápido da vuelta la bolsa y separa las cosas con el pié. Los anzuelos los tiene todos oxidados con restos de carnada vieja desde 1967. Un trapo mugroso, duro y reseco que alguna vez fue blanco, con pedazos de cosas pegadas de dudoso origen. El dueño es el único que se atreve a meter los dedos allí. Las plomadas blancas de sal, el reel oxidado, sin grasa, haciendo un ruido espantoso cuando logra que gire un poco, luego de golpearlo varias veces con el mango de la caña para aflojarle un poco las costras, las madres todas mezcladas con el nailon mellado, retorcido y con restos de quien sabe qué, pegado. Un cuchillo que no corta ni el aire, que sirve tanto para cortar carnada como para comer (sin lavarlo). La caña emparchada con cinta aisladora (de varios colores) y hilos diversos. Pero es buenazo, le trata de prestar el equipo a cualquiera pero nadie lo quiere ni empujar con un palo.
PESCADOR FANATICO: Es capaz de llevar el equipo de pesca en su luna de miel (y lo peor de todo es que lo usa). Donde ve un balde con agua o un radiador de auto sin tapa allí está haciendo unos tiritos por las dudas. Pierde la noción del tiempo si está pescando, no sabe la hora que es, ni la fecha del día y no conoce, ni saluda a nadie. Puede estar 3 días arriba de un muelle pescado y hay que sacarlo (entre varios) con los pelos duros por la sal. No le importa si llueve, si hacen 45º de calor o -12º de frío o si el viento le hace volar las manchas a las vacas. Con tal de pescar saca lo que venga, aunque sean aguas vivas, el tipo chocho. No es de prestar equipo porqué supone que lo que nos prestó, justo en ese momento lo puede necesitar.
PESCADOR AL 90 %: este es raro, formado por el pescador que pesca pero que no come o limpia los pescados que saca, ya sea porque no le gusta el pescado o le dá asco. Es un grupo casi en vía de extinción pero existen.
PESCADOR ROBOCOP: es el pescador que para pescar saca un equipo como para mover submarinos. Usa un malacate de 4 x 4 como reel, usa nailon que parece tanza para bordeadora de pasto, unos anzuelos como ganchos de carnicero. las plomadas son impresionantes, gasta 1/2 kilo de pescado por encarne, y cuando lanza hay que dejarle mucho, pero mucho espacio porque para tirar todo eso tiene que tomar carrera. Obviamente pesca poco porque hay peces que ni pueden abrir la boca para comerse esos garfios de pirata. No se le puede pedir nada, salvo que necesite un ancla para barco (que el llama anzuelo).
PESCADOR EXAGERADO: es el que todo lo agranda, todo lo hace extremo, todo crece y se modifica. Si el día que salió a pescar había una (1)corvina saltando cada vez que cuente la anécdota se van a convertir en muchos peces saltando, de allí al cardumen jamás visto por humano alguno que cubría el mar de izquierda a derecha, de allí a delfines, de allí a orcas asesinas y de allí a una ballena varada a sus pies. Si hubo una brisa que le movió la gorra, pasamos a viento de este, a ventarrón fuertecito, de acá estamos a un paso al tornado, y ni que hablar del huracán que le voló la gorra. Un pejerrey respetable sacado en una laguna planchada, se transforma en sacar tres juntos con la misma línea, de allí a que sean los demonios jamás vistos (Vieja llama al Noticiero !!!) y por último a que al final salte de golpe un dorado y se prenda de unos de los pejerreyes y … saquemos rápido la línea que viene un tiburón. Lo peor de todo es que se olvida que a veces le cambia las cosas a los amigos que van con él, que conocen la historia desde el principio. Echar a un gato vagabundo que se quiere comer un pescado recién sacado, con el tiempo y paciencia se convierte en una lucha encarnizada con un puma atacándolo solamente con una boya. Si usted a duras penas tira la línea a 50 metros, el ha vaciado cargas enteras de reeles por no hacerle el nudo al final de la línea, y no se asuste si le dice que sí a los 6 meses la encontró porque la enchanchó con otra que tiro en el mismo lugar y que aun tenia los anzuelos llenos de peces.
PESCADOR DESPISTADO: es otro raro ejemplo, es el que va a pescar y cuando llega se da cuenta que no trajo la manija del reel, o los pasahilos desmontables de la caña; o pero aún la caña misma. Es el que va a pescar a un río o a una laguna y lleva el equipo que usa para pescar tiburón embarcado, equipo que no llevó cuando se embarcó el mes pasado y estuvo todo el día viendo flotar unas boyitas chiquititas naranja porque no tenía otra cosa. No sirve de nada estar la semana anterior a la salida diciéndole que lleve todo, igual algo le va a faltar. Arma todo y a las 3 horas se aviva que esta usando anzuelos que no van o que se olvidó de encarnar. Entre todo el grupo hay que hacer una colecta de equipo para que por lo menos no se quede aburrido sentado y pesque un poco, sabiendo de antemano que lo que se le preste lo pierde o se lo olvida. Siempre algo por salida se le escabuche: o es el cuchillo (y eso que tiene la funda agarrada al cinturón), o son las madres, o se olvida el pie de la caña o pone las cañas en el porta cañas del auto o deja algo apoyado arriba del techo y 200 km. más adelante se acuerda de que no las ató o que no sacó lo que puso, que puede ser desde la caja de pesca, el celular, los documentos o lo que sea. Anteojos y gorras son nuevos con cada salida. Si uno es malo se le puede pedir cualquier cosa del equipo total después se le dice que las perdió él.
PESCADOR HISTORICO: se acuerda de cada uno de los peces que sacó desde 1810 a la fecha, se acuerda con quién fue a pescar, que llevaba cada uno de ropa, que comieron, en donde, como se llamaba el dueño del parador donde durmieron, donde compraron la carnada, es casi casi molesto. Se enoja si un lugar que conocía, no existe más y se pasa horas diciendo que "cuando el venía con fulano, o con el papá de mengano que está acá presente y no me deja mentir, sacamos ………… y me acuerdo porque ese día el presidente Pirulo firmaba un decreto para vender soda en sifones y bla. bla. bla. ………….." y sigue sin parar un rato largo. Le conoce la historia a cada anzuelo que tiene y dice cosas como "con este anzuelo saqué el 3 de marzo de 1953 a las 11:30 hs un ……. que pesaba ….. en la costa de ……. ese día estaba con ……… que después se casó con ……… y tuvieron 2 hijos que el más pequeño se recibió el año pasado de médico y se fue al Canada a trabajar, el otro es un vago …….y bla. bla. bla." Es un buen tipo, no es malo es un amigo útil para esas noches serenas de verano en donde es bueno escuchar un poco de charla amena. pero como el dulce de leche, si es mucho empalaga. Si le pide algo prestado no le quepa la menor duda que se acuerda de que tiene que devolvérselo, es más es capaz de recordar que le pidió en cada salida y si le sirvió de algo.
PESCADOR CIENTIFICO: Es otro de los “bichos” que pululan por allí. Es casi insoportable. Calcula con exactitud el largo de las brazoladas, calcula exactamente la plomada a usar, usa perlitas iguales, del mismo color y de ser posible compradas en el mismo lado. Las medidas dadas para las brazoladas, las madres y toda otra cosa medible en una línea es respetadas como un Mandamiento. Calcula el tamaño de la carnada mirando por 10 minutos cada anzuelo, la corta como sí operara con bisturí, la empareja, la coloca exactamente igual en cada anzuelo, sino es así rectifica y comienza de nuevo. Si tiene que atarla, corta pedazos iguales de hilo o alambre y ata la carnada a los anzuelos e-x-a-c-t-a-m-e-n-t-e igual. Después calcula mentalmente la distancia de tiro que tiene que hacer y si no llega con el lanzamiento e-x-a-c-t-a-m-e-n-t-e donde calculó, recoge el nailon y vuelve a tirar. El resto del grupo lo mira asombrado, y él como si nada.
"... es por tanto extrañar que no cierra mi herida ..."
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